“Vapear” una moda que daña las vías respiratorias y produce cáncer

Poco a poco vamos disponiendo de más y mejores estudios acerca de los efectos del cigarrillo electrónico sobre la salud, sobre todo en comparación al tabaco tradicional.

Es un invento relativamente nuevo y que va acumulando investigaciones con muestras más amplias y mejor seleccionadas, con conclusiones más sólidas. La última investigación al respecto afirma de forma tajante que el cigarrillo electrónico aumenta el riesgo de sufrir cáncer.

El estudio ha sido realizado por la Universidad de Minnesota, y se basa en la cantidad de elementos carcinógenos presentes en la saliva tras vapear para relacionar esta actividad con el cáncer.

Directamente compararon muestras de saliva antes y después de vapear con las de otras personas que no lo hicieron. El resultado es bastante claro: tras fumar de estos cigarrillos electrónicos, aumenta considerablemente la cantidad de formaldehído, acroleína y metilgloxial, tres elementos conocidos de sobra por causar daños permanentes al ADN.

Esto significa que vapear aumenta el riesgo de cáncer, aunque no se especifica cuánto aumenta. Lo que está claro, eso sí, es que pese a ser una actividad carcínogena lo es en menor cantidad que consumir tabaco convencional.