Los miles de millones que se pagaron en coimas en Córdoba tienen a las autoridades esculcando su fortuna. SEMANA consultó los registros inmobiliarios de Edwin Besaile. Su nombre aparece vinculado a 103 propiedades, que suman 2.360 hectáreas.
“Deseo que le vaya bien en estos cuatro años. Desde la posición que estemos va a encontrar un amigo”. Estas fueron las palabras de bienvenida que le dio Alejandro Lyons a su sucesor Edwin Besaile. La frase tenía un dejo de ironía pues la campaña había sido compleja y la sucesión significaba políticamente una enorme derrota para Lyons. En Córdoba se decía que era tanto el malestar que Musa Besaile y Bernardo Miguel «el Ñoño» Elías tenían con él, que el deseo de derrotarlo en las urnas era lo único que había podido unirlos. Finalmente, el hermano de Musa se impuso en la contienda y demostró por qué ‘Los Ñoños‘ eran la fuerza política de más peso en el departamento.
Un año después, el mismo Lyons terminó por darle el golpe definitivo para que su paso por la gobernación fuera apenas un soplo. Desde Estados Unidos, el ex gobernador se ha convertido en el mayor delator de la forma como la corrupción se enquistó en las entidades del Estado y exprimió sus recursos. Sus declaraciones tienen en jaque a la poderosa familia Besaile Fayad. A Musa ya lo tiene en la cárcel la Picota por cuenta del escándalo del carrusel de la toga. Esta semana, un segundo coletazo pegó sobre Edwin, quien fue suspendido de su cargo será imputado por dos delitos. Y, en una entrevista en la W, dejó claro que también hablará de Johny, el otro hermano que aspira a quedarse con la curul del senado.
Lyons ha relato al detalle cómo desde la gobernación se orquestó el millonario saqueo a las arcas del departamento. Dos hechos han ocupado la atención de los investigadores. Por un lado, el llamado ‘cartel de la hemofilia‘ que implica malversaciones de fondos por 42.000 millones por cuenta de pacientes falsos. Por otro lado, el desangre al Fondo de Regalías a través de proyectos de Ciencia y Educación que implica saqueos por 30.000 millones.
La versión de Lyons es que existió un pacto con los Besaile que consistía en que la plata de las coimas se repartían 50-50. Parte del dinero -dice el exgobernador- fue para pagar la campaña de Edwin, quien ha manifestado que cuenta con el material probatorio para desvirtuar las declaraciones de quien fue su enemigo político.
Las declaraciones de Lyons levantaron un manto de duda sobre la inmesa fortuna de la familia Besaile. Aunque en Córdoba cuentan que son «ricos de cuna» pues su padre Musa Abraham Besaile Jalife manejaba los cultivos de arroz de la región, la evidencia alrededor de los dineros robados del departamento despertaron la suspiacia sobre cuánto de esto ha ido a parar a sus arcas personales.
Esa lupa sobre los bienes de los Besaile no es nueva. Para el 2000, año en el que Jhony Besaile terminó periodo como alcalde de Sahagún, la Contraloría embargó como medida cautelar tres de las haciendas de los hermanos: La Ye, Sahagún y Las Palmas. Esta medida, estaría relacionada con un proceso fiscal que adelantaba el organismo de control por irregularidades en un contrato para la construcción de letrinas, lío que lo tuvo dos veces suspendido de su cargo de mandantario regional.
Por cuenta de las revelaciones de Lyons, las autoridades escudriñan en los bienes de Edwin Besaile para determinar si el robo de las regalías y del cartel de la hemofilia pudo haberse desviado a su propio patrimonio. SEMANA consultó los registros inmobiliarios en donde aparece vinculado el nombre el nombre del gobernador. El listado de propiedades alcanza los 103 registros inmobiliarios, en Barranquilla, Sahagún, Cereté, Chinú y Caimito. El número de hectáreas asociada a estas propiedades supera las 2.360.
El poder que tiene este apellido en Sahagún, su tierra natal, salta a la vista. En uno de los municipios que más parlamentarios pone en el capitolio, Edwin Besaile y su familia tienen alrededor de 60 propiedades, entre lotes, haciendas y locales comerciales. Al sumar las extensiones de tierra disponibles en los registros el gobernador aparece vinculado a más de 1.500 hectáreas en esta región.
La primera propiedad aparece a nombre de los hermanos en 1983 en la vereda Trementino. En adelante su poderío comenzó una expansión que hasta el año 2016 todavía no paraba. Por su extensión, sobresalen valiosas propiedades heredadas, como lo es la Hacienda San Nicolás, de 350 hectáreas.
Pero Edwin Besaile también ha hecho sus propias adquisiciones. Una de ellas fue entre los años 2013 y el 2014, cuando compró tres lotes que los englobó para conformar la finca Villa Sofía, de 208 hectáreas. Uno de estos lotes fue vendido por Manuel Ramón Bula Bula, el abogado cartagenero, exdirector del Incora y exgerente regional del Icetex.
También sobresale una propiedad llamada Lote de Terreno Rural, ubicado en el caserío Trementina. La propiedad tiene 218 hectáreas y fue comprada por 910 millones de pesos en el año 2013 al ganadero Jose Adalberto Bula Bula. Sobre esta propiedad pesa una hipoteca desde el año 2014, que según los registros inmobiliarios, está por 1.300 millones de pesos. A su nombre también aparecen seis locales en plena zona comercial de Sahagún.
En Cereté, el nombre del gobernador aparece relacionado a 17 predios. Tres haciendas ubicadas en Ciénaga de Oro -que suman 384 hectáreas- fueron herencia de su padre. Sin embargo, para el año 2013, Besaile comenzó a comprar terrenos en la vereda el Venado, con lo que se hizo a una docena de lotes de tamaños que no superan las 10 hectáreas, y que sumados ocupan 86 hectáreas.
Precisamente Ciénaga de Oro es uno de los municipios donde Lyons señala que se han hecho millonarias transferencias en los últimos meses por parte de Edwin Besaile para poder seguir manejando la contratación.
En Chinú, el gobernador suspendido tiene 290 hectáreas en dos predios: Las Aguitas de la Luz y Barranquilla. Ambos fueron comprados por los hermanos Edwin, John y Musa en el año 1997. Y en Caimito, Sucre, el apellido Besaile aparece vinculado a 22 propiedades que llegan casi a las mil hectáreas. Las de mayor extensión son La Estación y Villa Yolanda, con 229 hectáreas y 219 hectáreas, respectivamente, y fueron heredadas por su padre a la familia.
Otras dos millonarias propiedades provenientes de su padre están ubicadas en Barranquilla. Una casa quinta en el exclusivo sector de Altos del Prado y otra en Alturas de San Vicente.
El lunes, Edwin Besaile tendrá que presentarse ante un juez del Tribunal Superior de Bogotá. La Fiscalía le imputará los delitos de peculado y concierto para delinquir. Los hechos tienen que ver con el pago de $1.500 millones de pesos en el 2016 a falsos pacientes de hemofilia. No obstante, después de las revelaciones hechas por Lyons a la justicia, este podría ser el primero, pero no el mayor de sus problemas.
SEMANA