Mark usa tacones hasta para ir al trabajo. Y lo hace con orgullo.
La sociedad actual siempre ha determinado, prácticamente por inercia, que hay vestuarios específicos para ser usados por hombres y mujeres por separado. Como, por ejemplo, los vestidos, faldas, y tacones. Y es que aunque en ocasiones las mujeres decidan optar por trajes masculinos o jeans de sus novios para vestirse, la sociedad rápidamente se pone a juzgar si un hombre decide usar prendas “femeninas”. Pero lo que el mundo realmente no sabe es que, la verdad, la ropa nunca tuvo ni tiene género.
Y así lo demuestra un hombre llamado Mark Bryan.
Mark vive como cualquier otra persona. Trabaja, disfruta de su casa, tiene amigos, pero lo que lo diferencia es que adora usar tacones y faldas, hasta para ir a trabajar.
Y, lo más sorprendente de todo, es que se ve realmente espectacular con TODOS sus atuendos. En serio.
“Me visto así porque puedo, sólo por ser diferente. Siempre he admirado a las mujeres que usan faldas ajustadas y tacones. No sexualmente, sino por el poder que transmiten. No me visto para que me sexualicen, sino como una forma profesional.
Para mí la ropa no tiene género“.
Así mismo, Mark explica que prefiere las faldas por sobre los vestidos, pues estas le permiten jugar con looks y mezclar lo femenino con lo masculino.
“Con los pantalones de hombres tienes solo algunas opciones de color: negro, gris, azul marino y café y no hay pantalones estampados. Con las faldas puedes añadir rojo, verde, azul, floreado, animal print, entre otros. Al igual que los zapatos“.
Mark Bryan a Bored Panda.
Y le encanta.
“No me siento diferente, solo es ropa. Cuando uso tacones me siento más alto, pero también empoderado. Quizá porque tengo la fortaleza de sentirme confiado por no usar la ropa que se dicta, y además tengo la fortaleza para no sentirme presionado en el
