La subintendente Sandra Marín Urueta, de 34 años, adscrita a la Policía Metropolitana de Barranquilla, denunció por medio de redes sociales el supuesto acoso sexual del teniente coronel Wilson Fernando Carvajal, comandante operativo (e), que habría terminado en una presunta persecución laboral.
Escándalo en la Policía de Barranquilla. Subintendente denuncia persecución laboral tras, supuestamente, no acceder a encuentros sexuales con el coronel Fernando Carvajal, comandante operativo. La institución alista un pronunciamiento oficial. https://t.co/if1kX8qDUN pic.twitter.com/RYEIZ3FiT9
— Revista Semana (@RevistaSemana) December 9, 2024
En diálogo con SEMANA, la suboficial narró el calvario que comenzó a vivir entre julio y agosto por este oficial de la Policía de Barranquilla.
Marín aseguró que todo se desató tras su negativa de tener un presunto encuentro sexual con el oficial y, desde ese momento, él habría dado la orden de perseguirla en sus quehaceres diarios como uniformada que labora en la Terminal de Transportes, situada en el municipio de Soledad, Atlántico. Aseguró que lo único que busca es estar tranquila y ser la voz de muchas mujeres que con un uniforme pueden estar pasando lo mismo que ella.
“Yo temo por mi seguridad después de hacer esto público en mis redes sociales, porque fue el único medio en el que pude llamar la atención. El coronel tiene mucho poder porque su esposa tiene un alto cargo en la Gobernación del Atlántico y las influencias son muchas, y por eso temo por lo que me pueda pasar”, dijo la suboficial. Marín aseguró que, tras sus denuncias, teme también por sus hijas y su mamá.
Dio a conocer que tiene chats, fotografías y otros elementos materiales de prueban todas las acusaciones que está realizando por medio de las redes sociales. Con todo este material, su abogado está preparando la denuncia formal ante la Fiscalía General de la Nación.
“Este acoso viene desde que yo empecé en la Policía porque como tengo un cuerpo bastante cuidado, entonces creen que como uno es subalterno pueden hacer lo que quieran con uno”, expresó.
La suboficial, que ascendió por resolución en el mes de septiembre, pero por ceremonia en octubre, sostuvo que lleva 14 años en la institución, pero se siente cansada de siempre sufrir lo mismo. Decidió ser la voz de muchas mujeres que hoy, como ella, padecen una situación similar.
También sostuvo que no ha sido la única que le ha tocado vivir dentro de la Policía Nacional, pues cuando ingresó y terminó el curso por poco no se gradúa.
Al mismo tiempo, manifestó: “Yo demandé internamente, me arreglaron la situación, pero duré un año aplazada, entonces no me gradué, me perjudicó, obviamente por todo eso no me gradué ese año, sino que tuve que esperar hasta el 2012 para graduarme”.
Marín, sin titubeos, dijo que dentro de la institución no solo hay casos de acosos contra las mujeres, sino también en hombres que —muchas veces— prefieren renunciar o, en el peor de los casos, quitarse la vida.
“A raíz de todo eso, hasta la fecha, siempre he sufrido de acoso y persecución, siempre, y esto a raíz de mi físico; o sea, siempre se meten con el físico mío. Desde el día cero que yo ingresé a la Policía hasta la fecha, ese ha sido mi problema aquí. Entonces digamos que el llamado sí, obviamente, es que todas y todos, porque no solamente sufrimos de acoso las mujeres aquí en la institución, sino también los hombres, acoso laboral, acoso sexual, o sea, psicológico, en infinidades. Sé que muchos no tienen la valentía de denunciar, y que a veces lo primero que hacen es renunciar, o se quitan la vida”, sostuvo.
Sandra Marín aseguró que todo el acoso sexual y laboral del que venía siendo víctima terminó en un traslado a la ciudad de Cali; sin embargo, ella solicitó un recurso para que fuera derogado por un tema especial que tiene que ver con sus hijas y su mamá, quienes dependen de ella.
Ahora, solo se espera que la Policía Metropolitana de Barranquilla tome decisiones con el coronel acusado de estos hechos que han generado indignación entre la sociedad, que clama justicia y pide que no se repitan.