El gobierno Nacional convocó el pasado miércoles 27 de septiembre una jornada de movilizaciones en todo el país. Con esto, el presidente Gustavo Petro, al parecer, quería medir su popularidad, la cual según las encuestas está baja, asimismo pretendía presionar para que sus reformas vuelvan a caminar en el Congreso.
Es de resaltar que dichas movilizaciones desataron toda clase de polémicas por presentarse a un mes de las elecciones regionales además de las críticas por la utilización de millonarias partidas públicas para financiar los gastos de las marchas.
Por su parte, el ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, negó que el Gobierno haya pagado para que las personas salieran a marchar, sin embargo, aceptó tímidamente que se gastó plata para desplazar a indígenas desde el Cauca hasta Bogotá.
Luego de toda la controversia, el presidente hizo una publicación este viernes 29 de septiembre en su cuenta de X (antes Twitter) para responderle al periodista Luis Carlos Vélez sobre cuánto le había costado al país “el traslado de los indígenas, los refrigerios y los conciertos”, para las marchas del pasado miércoles, y terminó reconociendo que sí hubo un respaldo financiero para facilitar las movilizaciones.
En ese orden de ideas, se concluye que Petro admite apoyo financiero a las marchas pues la comparación que plantea está en clave de gastos de dinero.
En el Sistema Electrónico para la Contratación Pública (Secop) quedó consignado el contrato por 263‘109.000 pesos para la logística de las movilizaciones del pasado miércoles.
Dentro de los rubros que cubrió el actual contrato están las luces, las vallas, los brigadistas, las pantallas, los refrigerios y el sonido.