Imagínese tomar una manotada de seis dulces y metérselos al tiempo a la boca. O devorar, en una sentada, tres paletas de agua. O ir a la despensa, robarse 10 cubos y medio de azúcar y comérselos de un golpe. Pues eso es lo que está haciendo usted (o su hijo) cada vez que se toma una cajita de jugo de esos que se han vuelto invitados comunes en las loncheras.
La información y sus equivalencias se desprenden de analizar, de la mano de una especialista, la tabla nutricional de alimentos que por legislación nacional deben tener todos los productos envasados para consumo humano y cuyo objetivo es “asegurar que la información nutricional sea veraz, precisa y clara para ayudarle al consumidor a elegir los alimentos más adecuados para una alimentación saludable”, según señala la directiva creada por el ministerio de Protección Social en 2007.
Según esa tabla, explica Lina Cruz Leguizamón, nutricionista y dietista de la Pontificia Universidad Javeriana, “los ingredientes mencionados en mayor cantidad son los azúcares con 20 gramos, 30 miligramos de sodio y 90 calorías. Se especifica, además, que el porcentaje que aporta del valor calórico total es de 7% teniendo en cuenta que esa base de una dieta de 2000 calorías diarias que es lo que en promedio debe consumir una persona adulta sana en general”.
¿A qué equivale un jugo de caja?
Comparamos las equivalencias de este alimento frente a otros similares y hallamos algunas conclusiones interesantes que se pueden resumir en esta imagen:
¿De qué están hechos estos jugos?
Veamos qué conclusiones podemos sacar de la tabla nutricional de uno de estos productos escogido en un supermercado de cadena.
Señala la especialista que en esa tabla queda claro que lo que más tienen este tipo de jugos procesados industriales es azúcar. Es decir, carbohidratos.
“Según las guías alimentarias colombianas, el aporte diario de carbohidratos debe ser del 45 al 65% del valor calórico. Si nos basamos en una dieta de 2000 calorías, serían 225g a 325 gramos teniendo en cuenta que cada gramo de carbohidrato aporta cuatro calorías”, dice Cruz.
De ese aporte, menos del 10% debe ser azúcar. El resto debe obtenerse de otro tipo de alimentos como cereales, raíces, tubérculos (papa) y leguminosas, entre otros (fríjol, garbanzos, etc.).
“Teniendo en cuenta que los jugos industrializados aportan 22 gramos de carbohidratos, de los cuales 20 gramos son simples, se entendería que únicamente tomando un jugo de 200cc de contenido estaríamos cubriendo el aporte nutricional máximo de azucares simples en la dieta”, añade la doctora Cruz.
Eso significa que con solo una caja, ¡una sola!, de ‘juguito’ se cubre la cantidad de azúcar máxima que se recomienda durante el día. Y el panorama se pone crítico si al lado de la bebida nos comemos unas galletas, un ponqué o cualquier otro tipo de golosina procesada.
Algunos consejos de nuestra especialista
¿Qué pasa cuando se come azúcar en exceso?
El exceso en el consumo de carbohidratos simples tiene consecuencias para la salud a largo y corto plazo, que incluyen hiperglicemias y deterioro de la capacidad de captación de glucosa en sangre que desemboca en males como diabetes, sobrepeso u obesidad, así como enfermedades coronarias.
¿Cómo saber si uno de esos jugos tiene menos azúcar o más fruta?
La verdad es que no hay ningún jugo procesado que tenga el 100% de fruta o una buena cantidad de ella. Lo mejor es cambiar esa costumbre y reemplazar estos jugos por una fruta entera. O de lo contrario, preparar el jugo en casa teniendo en cuenta que el 75% de su composición debe ser fruta y no agua. Además, evitar añadirle azúcar.
¿Y qué hacer en la lonchera de los niños?
Lo ideal de una lonchera, o de unas onces saludables es que tenga un carbohidrato acompañado por una fruta y por un lácteo. Tampoco es recomendable las opciones ‘light’, porque usan otro tipo de endulzantes que pueden generar hábito. Lo mejor es que siempre haya frutas en lo que llevan nuestros niños al colegio.
Tomado de ElTiempo.Com