El nuevo coronavirus se ha desplazado por varios continentes y ahora América Latina está en peligro de convertirse en nuevo foco ante la gestión gobiernos como el de Brasil.
El mundo registra, este martes, más de 5,5 millones de casos positivos, siendo el continente americano el nuevo epicentro de la pandemia y con vistas a focalizarse en la región latinoamericana.
De la cifra total, más de dos tercios se encuentran en Europa y Estados Unidos, según un recuento publicado por la AFP a partir de fuentes oficiales.
De acuerdo con esa agencia de prensa, se registraron al menos 5.505.307 casos de contagio, con 346.188 decesos, especialmente en Europa. En esa región, el conteo se desglosa en 2.047.401 confirmados y 172.824 muertes. Por su parte, Estados Unidos tiene 1.662.768 de casos y 98.223 víctimas fatales.
Sin embargo, el número de casos declarados en el mundo se ha duplicado en un mes y más de un millón de nuevos casos de la Covid-19 se registraron en los últimos once días. Los países con mayor número de infecciones son EE.UU., Brasil y Rusia, aunque este último tiene una baja tasa de letalidad.
Asimismo, la región del mundo con los niveles más altos de mortalidad y morbilidad por el virus sigue siendo Europa, por delante de América del Norte, América del Sur, Oriente Medio, Asia, África y Oceanía.
Countries need real-time mortality data for an effective #COVID19 response.
WHO together with @VitalStrat & @AfricaCDC released a new technical package on rapid mortality surveillance https://t.co/NeIZFNW774#WorldHealthData pic.twitter.com/5HcDjfXxBD
— World Health Organization (WHO) (@WHO) May 25, 2020
No obstante, algunos países del continente europeo han iniciado las fases de reapertura económica y social. Mientras, en EE.UU. el presidente ha quitado autoridad a sus gobernadores al pedir al pueblo que no obedezcan las medidas de aislamiento social, a la vez que llama a la apertura económica por encima de la seguridad sanitaria.
En Brasil, el presidente Jair Bolsonaro sigue una agenda que ha provocado la dimisión de dos ministros de Salud y numerosos pedidos de juicio político por su mala gestión ante la pandemia. El país, fronterizo con varias naciones del cono sur latinoamericano, no ha implementado una política para frenar el contagio y Bolsonaro ha convocado a eventos públicos en los que, incluso, aparece sin mascarilla.