El sacerdote obligó a la menor a tener relaciones íntimas con otras personas y grabó en video los encuentros sexuales.
El sacerdote de 37 años, quien estuvo a cargo de un despacho parroquial en Neiva, Huila, entre 2018 y 2019, sometió a una niña de 13 años a distintas conductas sexuales.
No conforme con esto obligó a la menor a tener relaciones íntimas con otras personas y grabó en video los encuentros sexuales.
La Fiscalía afirmó que: «la menor de edad afectada era familiar de una mujer con la que el religioso sostenía un vínculo sentimental».
El juez penal impuso al sacerdote una pena de 16 años y 6 meses de prisión por los delitos de: acceso carnal abusivo con menor de 14 años agravado, acceso carnal violento agravado, actos sexuales abusivos con menor de 14 años agravado y pornografía con persona menor de 18 años.