En redes sociales circularon graves denuncias por parte de algunas jóvenes que trabajaron en la compañía Permoda Ltda, que maneja algunas marcas de ropa conocidas como Koaj, y que afirman haber sufrido de «acoso laboral» y «acoso sexual».
Una de las víctimas es Juana Camila Pérez, una joven que trabajó por alguna temporada en Gran Plaza Bosa, uno de los puntos de venta de esta reconocida marca ubicado en Bogotá. En su denuncia, la víctima afirma que sufrió «acoso sexual» y laboral por parte de dos gerentes que administran las tiendas.
«En marzo del año 2019 llegó el gerente a la tienda de Koaj en la cual yo laboraba como asesora comercial. Se presentó el aislamiento obligatorio y de cierta manera con este señor no me conocía bien, luego de esto, entre abril y mayo, él me llama para empezar a laborar a puerta cerrada, a lo cual yo acepto. Todo estaba bien, hasta que en junio empezó a acosarme haciendo comentarios demasiado morbosos hacia mi cuerpo: ‘qué ricas tet* y cul*», relató la joven.
Asimismo, señaló que en varias oportunidades pidió al hombre, cuyo cargo es administrador del punto del sur de Bogotá, que no le hiciera dichos comentarios. «Me trataba de coger del brazo para así con sus manos poder tocarme los senos de la manera más asquerosa y yo me soltaba y le decía que me respetara, pero él como buen acosador sexual solo se reía», sostuvo.
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En ese momento, los hechos presentados se relacionaban con casos de acoso sexual, sin embargo, más adelante, la joven comenzó a sufrir de acoso laboral también en Koaj: «Me mandaba a almorzar tarde y sola, de manera que no estuviera con ninguno de mis compañeros de trabajo y él se subía a tratarme de tocar las piernas. Con lágrimas en los ojos le decía que no lo hiciera más, que yo iba a hablar, pero él siempre se reía y me decía: ‘yo soy el gerente, usted es una simple asesora'».
En medio de la situación y empezar a notarse su depresión frente al caso, Juana dio a conocer que habló con el gerente de la zona, pero la respuesta no fue la que esperaba. El administrador le expresó que el sujeto de la denuncia «era hombre y le daban ganas y más porque yo era bien bonita en ese momento».
De acuerdo con su denuncia, el hombre intentó besarla a la fuerza. Tal fue su angustia que la joven decidió pedir un cambio de tienda y finalmente llegó al punto del Centro Comercial Mercurio, ubicado en Soacha, municipio aledaño a Bogotá. Pero allí fue víctima de acoso laboral. «En diciembre de 2020 me empecé a sentir enferma, con mucha fiebre y cansancio, pensaba que era porque llevaba un mes sin descansar, el 29 de diciembre me agravé, me llevaron a la clínica y salí positiva para covid», contó.
En ese momento le dijo al gerente de ese punto que tenía incapacidad, pero además los días respectivos de aislamiento, a lo que él le respondió que no podía tomarse todos los días, sino únicamente los de incapacidad, lo que implicaba que debía trabajar aún teniendo el virus en su organismo.
Juana, por temor a ser despedida, tuvo que ir a laborar el 2 de enero, aún sin cumplir los días de aislamiento. Sin embargo, su estado de salud no era el mejor y pidió salir antes de su hora habitual, «me agravé y me dejaron ir, pero antes de irme me advirtieron que por haber hablado y no haber trabajado, se iban a desquitar».
Una vez completó su periodo de aislamiento volvió a trabajar, pero todo era un «infierno», afirmó. En su denuncia aseguró que la humillaron, además la sobrecargaron de labores, razón por la cual comenzó a enfermarse.
«Desde ese momento duré 7 meses incapacitada, con 30 incapacidades en total, tuve más de cinco hospitalizaciones, procedimientos dolorosos como electromiografías», afirmó. Además, le diagnosticaron fibromialgia (por estrés), dolor crónico, lumbago con afectación en el nervio ciático, episodio depresivo severo, transformó en ansiedad generalizada, había perdido la movilidad de la pierna izquierda
Aunque la movilidad de la pierna se recuperó, Juana se mantiene en tratamiento y toma medicina como tramadol, morfina, paroxetina, pregabalin, entre otros.
No obstante, no fue el único caso que generó revuelo en redes. Geraldine Roa, por su parte, también denunció que aproximadamente en mayo de 2021 fue víctima de acoso sexual en la tienda del Paseo Villa del Río, en Bogotá.
En el lugar, el gerente se comportó «confianzudo» y le hizo comentarios como que «necesitaba colágeno que si le colaboraba». «En diferentes ocasiones realizó comentarios poco apropiados incluso en una ocasión en frente de uno de mis compañeros dijo que si teníamos calor que nos quitaramos el buzo de dotación, pero con la única condición de que debíamos quedarnos sin nada», afirmó.
¿Qué responde la empresa Koaj?
Frente al revuelo que ha generado su denuncia, la compañía emitió un comunicado para explicar lo ocurrido. «Identificamos durante el fin de semana las publicaciones en redes sociales de dos personas que trabajaron con nosotros y que realizaron acusaciones de acoso laboral y acoso sexual por parte de unos funcionarios de la compañía. Rechazamos tajantemente cualquier acto como los que ellas exponen», sostuvo Koaj.
Asimismo, afirmó que en su momento, cuando ocurrieron los hechos y se conocieron las denuncias, se le dio un manejo al interior de la compañía. «Hemos identificado que ambas situaciones fueron atendidas de acuerdo con nuestro procedimiento y reglamento interno de trabajo, sin embargo, no fue posible concluirlos ya que situaciones personales de los involucrados suspendieron el normal desarrollo del proceso», se lee en la comunicación.
De otra parte, Koaj expresó: «nos comprometemos a retomar contactos con las denunciantes para que podamos profundizar en sus acusaciones, colaborar con las autoridades que nos requieran información». Sobre los gerentes involucrados en el caso van a ser suspendidos del cargo, según informó la compañía.
Vale mencionar que una vez se dio a conocer esta denuncia, varias personas que han trabajado en la compañía manifestaron que los malos tratos son reiterativos.
