La producción de miel de abejas en Córdoba se verá afectada por la muerte de miles de abejas que han sido víctimas de las fumigaciones con insecticidas. El último caso se registró en el municipio de Sahagún donde murieron 500 mil de ellas.
La denuncia la hizo el apicultor Darío Urango Jiménez, dueño del apiario La Reina, ubicado en el corregimiento de Bajo Grande, en Sahagún, en límites con el municipio de Ciénaga de Oro, donde murieron las abejas de 40 colmenas.
Sostuvo que en cada colmena había una población superior a 15.000 abejas, de las cuales murieron la mayoría, ocasionando pérdidas cercanas a los 15 millones de pesos, equivalentes a la producción de una tonelada de miel de abejas al año.
El apicultor indicó que había solicitado un crédito con el Banco Agrario para impulsar el negocio y expandir la comercialización de miel a nivel internacional, pues en la zona, de abundantes árboles y bosques, hay una buena producción de miel. Sin embargo, un vecino fumigó su cultivo causando la muerte de las abejas.
No es la primera vez que una situación similar ocurre en el departamento de Córdoba. A finales del año anterior cerca de 72 millones de abejas murieron en el municipio de Tierralta, alto Sinú, según la denuncia hecha por Euclides Herrera, miembro del Comité Apicultor de Córdoba.
En ese momento resultaron afectadas 1.200 colmenas de propiedad de 55 familias dedicadas a la producción de miel, con lo cual se puso en riesgo la mayor producción del departamento de Córdoba, pues se dejaron de producir 50 toneladas de miel.
Funcionarios de la Secretaría de Desarrollo Económico de Córdoba, miembros del Comité Apícola Departamental, la Secretaría Nacional de la Cadena y los apicultores de la zona han venido analizando la situación que se está registrando presumiblemente por envenenamiento con agoroquímicos en esta sección del país.
Finalmente, se advirtió que si la situación persiste podría ponerse en riesgo la producción de las 400 toneladas de miel al año en el departamento de Córdoba.
EL UNIVERSAL
