El caso de Juan Felipe Rincón, hijo del inspector general de la Policía Nacional, William Rincón, tomó un giro inesperado tras su fallecimiento en una riña en Bogotá. Según información reciente, el joven de 21 años está ahora en el centro de una investigación por presunto acoso a menores de edad. Las autoridades descubrieron conversaciones en su teléfono que sugieren un comportamiento inapropiado con al menos dos menores, una de ellas de apenas ocho años.
El incidente, que inicialmente se consideró un caso de intolerancia, evolucionó a medida que nuevas pruebas salieron a la luz. Una versión extraoficial sugiere que el altercado que resultó en la muerte de Juan Felipe podría haber sido un ajuste de cuentas por parte de familiares de una de las menores involucradas. Estos habrían descubierto que el joven mantenía contacto con la menor a través de redes sociales, específicamente Instagram, donde presuntamente le enviaba material explícito.
Las conversaciones encontradas en el celular de Juan Felipe Rincón muestran, según los informes, cómo persuadía a las menores para que le enviaran fotografías comprometedoras. En uno de los chats, se observa que el joven incitaba a una menor de 15 años a enviarle fotos ligeras de ropa, mientras que él también le habría enviado contenido inapropiado. En otra conversación, se evidencia que la menor le pide un encuentro, a lo que él accede, aunque se sospecha que ya eran los familiares de la menor quienes escribían en su lugar.
Otros chats muestran una conversación en la que, supuestamente, el joven asesinado le reclama a una de las menores por no enviarle contenido mucho más explicito, por lo que ella respondió de forma tosca, mientras que Juan Felipe le pidió que lo “consintiera”. Igualmente, se supo que, al parecer, ambos habrían estado pactando un siguiente encuentro para el lunes 25 de noviembre.
Además, se conoció que en el teléfono de Juan Felipe se encontró material que indicaría contacto con una niña de ocho años, a quien también habría enviado contenido explícito. Estas revelaciones han complicado aún más el caso, que ahora es objeto de una investigación exhaustiva por parte de un grupo especializado que busca esclarecer los hechos y determinar la veracidad de las acusaciones.
El caso ha generado un gran interés público y ha puesto en el centro de atención no solo las circunstancias de la muerte de Juan Felipe, sino también las acusaciones de acoso que han surgido en su contra. Las autoridades continúan trabajando para reunir todas las pruebas necesarias y llegar a una conclusión definitiva sobre lo ocurrido.
