China ha comenzado los ensayos clínicos en humanos de dos posibles vacunas contra el coronavirus SARS-CoV-2, causante de la enfermedad COVID-19, informó este martes la prensa local.
Se trata de dos vacunas inactivadas, es decir, consistentes en microorganismos que se han matado a través de procesos físicos o químicos.
La primera de las candidatas, que obtuvo la licencia para proceder a ensayos clínicos el pasado domingo, ha sido desarrollada por el Instituto de Virología de Wuhan (la ciudad centro-oriental china donde se detectaron los primeros casos de la enfermedad) de manera conjunta con la sucursal en esa misma urbe de la empresa Sinopharm.
La segunda es el resultado del trabajo conjunto de varias empresas, con Sinovac Research & Development a la cabeza. Esta empresa es una subsidiaria de Sinovac Biotech, que trabajó también en una vacuna contra el Síndrome Respiratorio Agudo y Grave (SARS, en su acrónimo inglés) en 2003.